Hoy toca despedir a uno de esos jugadores que el tiempo convertirá en esencial para comprender la historia de nuestro fútbol, el último tipo capaz de arrancarle unas lágrimas al escudo Real del Madrid.
Raúl González Blanco, bautizado como Pata Negra por Gaspar Rosety, deja el club blanco después de 16 temporadas en el primer equipo y una interminable colección de trofeos individuales y colectivos.
Y lo hace acordándose de tres personas que le han marcado a lo largo de esta singladura a bordo de un balón:
- Fernando Redondo, compañero de habitación y cómplice en aquel inolvidable gol en Old Trafford.
- Jorge Valdano, el preparador que apostó ciegamente por sus capacidades contra la opinión de José María García.
- Pep Guardiola, su gran amigo en el eterno rival y el jugador que le puso el pase para su primer gol con la selección nacional.
Precisamente Gaspar Rosety, que le dejó ese sobrenombre para la historia y que a día de hoy es Jefe de Medios de la RFEF, sentirá tanto como yo el cenizo que ha perseguido al 7 blanco cuando se enfundaba la remera del equipo de todos los españoles.
Recuerdo aquel Mundial U-20 en Qatar, el Europeo U-21 en Montjuic, los JJOO de Atlanta...
Ya lo dice el refrán:
"El mejor escribano echa un borrón..."
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