jueves, 26 de mayo de 2011

Salgan y disfruten (2.0)

Mañana viernes La Deporteca de Radio Marca (18:15 horas) estará dedicada a la final de la Champions League que un día después enfrentará en Wembley a F.C. Barcelona y Manchester United. Para la ocasión, Natalia Freire recupera este texto que ya sirvió para ambientar la final de Roma en 2009.

Salgan y disfruten

Todo empezó cuando el seis despegó sus pies del suelo para quedar colgado del cielo de Kaiserslautern y dejar el cuero acunado en las mallas del arco de Ehermann.
Aquel vuelo sin motor y aquel testarazo en el infierno del Fritz Walter Stadium fueron la primera muesca en la espada de D´Artagnan y Los Tres Mosqueteros.
Luego, el flaco de la gabardina clara y el camel sin filtro les dijo : "Salgan y disfruten".
Y lo hicieron, y se trajeron a casa la copa de las enormes orejas.
Eso fue hace casi veinte años y ahora van a por otra:
- "El Holandés Volador" escribiendo la partitura casi siempre en la sombra.
- "El Gran Capitán" ejerciendo de forofo al lado de José Antonio no se pierdan el capítulo de Dr. Mateo Luque desde la cabina de Antena 3 TV.
- "El txikito de Olaberria" y su prominente apéndice nasal husmeando por los despachos de los estadios de medio mundo en busca de buenos peloteros para mantener vivo este pebetero azul y grana.
- Y el "Noi de Santpedor" dirigiendo la orquesta como entonces, pero esta vez desde el borde del pasto y vestido por Antonio Miró.
Como diría Johan:
"SALGAN Y TRAIGANLA DE VUELTA A CASA".

Més que un club

(Relato leído el viernes 22 de mayo de 2009 en La Deporteca de Radio Marca)

miércoles, 25 de mayo de 2011

Hablando de democracia

Un día lo escuche decir en una entrevista que se había decidido a escribir sobre fútbol para demostrarles a ciertos intelectuales que en el deporte de los tipos que corren en calzones detrás de una pelota también había material para la buena literatura. Al mismo tiempo quiso que la muchedumbre que abarrotaba los estadios los domingos por la tarde comprendiera que los libros no tienen dientes afilados para comerse a los que los evitan. Es uruguayo y como tal "nació gritando gol".
Ayer en Barcelona recibió el Premio Internacional de Periodismo Manuel Vázquez Montalbán, otorgado por la Fundación Fútbol Club Barcelona y el Colegio de Periodistas de Catalunya.
Estos días que tan en boga está en este país la palabra DEMOCRACIA, nadie mejor que Eduardo Galeano para hacerle justicia, esa misma que lleva pidiendo para el mundo años enteros en cada palabra que escribe. Este fue su discurso de ayer, para quien quiera entender:

"Quiero dedicar este premio a la memoria de Josep Sunyol, el presidente del Barça que en 1936 fue asesinado por los enemigos de la democracia. Y también quiero rendir homenaje a los deportistas peregrinos, que un año después, en 1937, encarnaron la dignidad, malherida pero viva, de toda España. Me refiero a los jugadores del Barça, que en 1937 recorrieron los Estados Unidos y México, disputando partidos de fútbol en beneficio de la República, y a la selección de jugadores vascos, que hizo lo mismo en varios países europeos. Por ellos me emociona recibir este premio, por ellos y también por los jugadores del Barça de nuestros días, dignos herederos del Barça de aquellos años: este premio que, por si todo eso fuera poco, lleva el nombre de mi entrañable amigo Manolo Vázquez Montalbán.
Con él hemos compartido varias pasiones. Futboleros los dos, y los dos zurdos, zurdos para pensar, creímos que la mejor manera de jugar por la izquierda consistía en reivindicar la libertad de quienes tienen el coraje de jugar por el placer de jugar en un mundo que manda jugar por el deber de ganar. Y en ese camino hemos intentado combatir los prejuicios de mucha gente de derechas, que cree que el pueblo piensa con los pies, y también los prejuicios de muchos compañeros de izquierdas, que creen que el fútbol tiene la culpa de que el pueblo no piense. También nos identificamos, Manolo y yo, en el placer de la ironía y la risa franca y todas las formas del humor, en nuestras maneras de decir lo que pensamos y lo que sentimos, en los artículos y en los libros y en las charlas de café. Porque no son dignos de confianza los solemnes caballeros, ni las damas ejemplares, que no son capaces de tomarse el pelo; y ni Manolo ni yo confundimos el aburrimiento con la seriedad, como también ocurre con otros colegas de ideas políticas parecidas a las nuestras. Y conste que no hablo en tiempo presente por error ni por descuido, sino porque fuentes bien informadas me han asegurado que la muerte no es más que un chiste de mal gusto. Y otro espacio compartido, muy importante para los dos: la reivindicación de la buena comida como una celebración de la diversidad cultural. Bien decía Antonio Machado que ahora cualquier necio confunde valor y precio, y aquel ahora del poeta es también nuestro ahora, porque lo mismo ocurre en nuestros días. La mejor comida no es la más cara y bien lo ha dicho Manolo, que más bien ocurre que la comida más cara no es más que una trampa engañabobos. Y yo también creo, como él, que el derecho a la autodeterminación de los pueblos incluye el derecho a la autodeterminación de la barriga. Y es más que nunca necesario defender ese derecho, más que nunca, en estos tiempos de obligatoria macdonaldización del mundo, cada vez más desigual en las oportunidades que brinda y cada vez más igualador en las costumbres que impone. Y hasta aquí llegué. Porque yo sé que cuando bebo demasiado corro el grave riesgo de decir estupideces, y yo quise alzar estas palabras como si fueran copas de vino, un buen vino tinto de por acá, para brindar con Manolo y por Manolo: una manera de beber por la dignidad humana y por la solidaridad, por el placer de jugar y la alegría de ver jugar cuando se juega limpiamente, por la alegría de estar juntos y por el pan y el vino compartidos,por los soles que cada noche esconde y por todas las pasiones, a veces dolorosas, que dan rumbo y sentido al viaje humano, al humano andar, al vent del món."

martes, 24 de mayo de 2011

Finales internacionales (III): Rijkaard y Ronaldinho

Decíamos ayer, que en la última conquista, la Supercopa de Europa, Louis Van Gaal ya había tomado posesión de su cargo en Barcelona. El holandés llegaba con el aval de un par de meneos serios al Real Madrid y una Copa de Europa en la mochila, la del gol de aquel juvenil de piel oscura llamado Patrick Kluivert.
Arrancaba la temporada 1997-1998 que daría con los huesos del Sporting en segunda división, con el Real Madrid otra vez Campeón de Europa y con el F.C. Barcelona haciendo doblete en Liga y Copa. Tarjeta de embarque para la Champions en el año del Centenario de la entidad.
Pero, como en El Corte Inglés, en la Ciudad Condal empezó una especie de primavera que hacía florecer tulipanes en cualquier esquina. En esas estábamos, cuando llegó un chasco mayúsculo en la Copa de Europa: en un grupo con el Manchester y el Bayern el equipo se despide prematuramente de la final que estaba apalabrada en el Camp Nou. Sirvió de consuelo la segunda liga consecutiva que permitía a Van Gaal intentar nuevamente atrapar a Ernst Happel. Ese curso 99-00 fue inolvidable y quedará para la historia: el fútbol español colocó tres equipos en las semifinales y el Valencia se encargaría de apear a los catalanes del sueño. En la final, jugada un día como hoy en el Stade de France de París, el Real Madrid alzó la Octava.
Después de aquí la nada, o mejor dicho, la travesía del desierto a lomo de los camellos del rey Gaspar. La afición culé, como escribió en su día Javier Marías, "se convirtió en una afición inverosímilmente desentendida de la suerte de sus colores". Hasta que el club fue rescatado por un Elefante Azul y el equipo de fútbol revivió por culpa de dos caprichos: el primero del vicepresidente de entonces, Sandro Rosell, que se trajo puesto de Nike a Ronaldinho Gaucho, y el segundo del recién presidente Jan Laporta, que compró la parte del pase de Samuel Eto´o al RCD Mallorca para obligar al Madrid a vender. Sin embargo, el mejor trabajo de todos lo hizo Txiki Begiristain que salió de compras con un gusto tan exquisito como el que tenía para acariciar la pelota. Suyas fueron las contrataciones de Márquez, Belletti, Gio, Giuly, Deco, Edmilson o Larsson. De ahí a reinar en Europa sólo había un paso.

COPA DE EUROPA 2005-2006: F.C. Barcelona 2-1 Arsenal

Con Rijkaard en el banquillo, el F.C. Barcelona ganó la liga con holgura (ese año Pinto fue Trofeo Zamora con el R.C. Celta) e iba a por el doblete en París. Pero antes ocurrió lo de Milán. Allí, en el majestuoso San Siro, Ronaldinho sacó toda la magia para convertir una pelota que era nada en una asistencia prodigiosa que Giuly mandó a dormir en la portería de Dida.
Y en París, bajo la lluvia, apareció Henrik Larsson para construir dos paredes que el Chacal y Belletti alojaron en la meta de Manuel Almunia.



SUPERCOPA 2006: F.C. Barcelona 0-3 Sevilla F.C.

Dos equipos españoles se veían las caras en el Estadio Luis II de Mónaco: el Barcelona como Campeón de Europa y el Sevilla como Campeón de la Copa de la UEFA. El equipo hispalense de Juande Ramos apabulló al campeón continental y con goles de Renato, Kanouté y Maresca se hizo con el trofeo por primera vez en su historia. Ese equipo posiblemente sea irrepetible: Palop, Alves, Navas, Poulsen, Luis Fabiano, Adriano, etc. Esos hombres llevaron al Sevilla a tocar el cielo. El último gol, de Enzo Maresca, fue un penalti de Puyol al recordado dorsal 16 Antonio Puerta.



MUNDIAL DE CLUBES 2006: F.C. Barcelona 0-1 Internacional de Porto Alegre

Después del varapalo en Mónaco, el Barcelona volvía a Japón para jugar el irónicamente llamado Mundial de Clubes. Separado el polvo de la paja, la previsible final se hizo realidad y hubo que pelear el título ante el Campeón de la Libertadores, el Inter de Porto Alegre. A su archienemigo, el Gremio, le había comprado los derechos de Ronaldinho el PSG, por lo que era un partido especial para el crack brasileño. Los Colorados eran prácticamente unos desconocidos y el Barcelona pensó que ganaría sin bajarse del autobús, o del  avión, para ser más exactos. Craso error. El gol de Adriano a poco del final dejó sin poder de reacción a los hombres de Frank Rijkaard. Allí vimos por primera vez a Alexandre Pato y allí también adquirió una medianía el Atlético de Madrid: Fabiano Eller.

domingo, 22 de mayo de 2011

Ascensos y descensos en Nacional B

A quién pueda interesar le dejo aquí el texto de las "Normas reguladoras de las competiciones de ámbito estatal de fútbol sala 2010-2011" en lo que respecta a ascensos, descensos y reestructuraciones:

DISPOSICIÓN DECIMOQUINTA

2. Cuando algún grupo de Primera División Nacional “B” tras producirse los ascensos y descensos, al mismo o del mismo, previstos por razones clasificatorias, se viera incrementado con un número mayor de clubes procedentes de Primera División Nacional “A” en él incluidos por criterios geográficos, ello no determinará, si el número de tales fuera uno o dos, el descenso a la categoría territorial de ninguno de los que mantuvieron, por su puntuación, la de dicha Primera División Nacional “B”, quedando el grupo constituido por diecisiete o, en su caso, dieciocho equipos.
Las Federaciones de ámbito autonómico están facultadas para modificar lo dispuesto en el apartado anterior, en el sentido de que aun siendo uno o dos los clubes procedentes de Primera División Nacional “A” que incrementen su grupo, ello determine que idéntico número descienda de Primera División Nacional “B” a competiciones de orden territorial. En todo caso, siendo más de dos los supernumerarios descendidos, deberán descender asimismo un número igual al de tal exceso, los clubes que hubieren ocupado los puestos inmediatamente anteriores a los que perdieron la categoría por su puntuación.
Cuando, por cualquier circunstancia, un grupo quede constituido supernumerariamente el CNFS deberá adoptar las previsiones pertinentes estableciendo el número de descensos que corresponda para que la situación quede regularizada al término de la temporada.

DISPOSICIÓN DECIMONOVENA

DESCENSOS A PRIMERA NACIONAL “B”

Transitoriamente y solo para esta Temporada 2010/2011, debido a la reestructuración de la categoría de Primera Nacional “A” descenderán a la categoría de Primera Nacional “B” los 3 últimos clasificados de cada grupo y los que sean necesarios para que la Temporada 2011/2012 esté configurada con 6 grupos
(cinco en la península y uno en las Islas Canarias) de 16 equipos cada uno, lo cual será comunicado por el CNFS oportunamente mediante circular antes del comienzo de la competición.

DISPOSICIÓN ADICIONAL TRANSITORIA
La competición de Primera Nacional “A” se disputará en esta Temporada 2010/2011 de acuerdo con las normas recogidas en el apartado correspondiente, a fin de que la configuración en la Temporada 2011/2012 sea de 5 grupos peninsulares y 1 grupo en las Islas Canarias con 16 equipos en cada uno.

DESCENSOS A CATEGORÍA TERRITORIAL

Descenderán a la categoría Territorial al menos los dos últimos equipos clasificados de cada uno de los grupos, siendo competencia de cada Federación Territorial las posibilidad de modificar el número de descendidos.

jueves, 19 de mayo de 2011

Caprichos del destino: Michel y de la Peña

En el descanso del partido Racing-Real Madrid del año 88, los chavales de la Escuela Municipal de Laureano Ruiz saltaron al césped del Sardinero a pegar unas patadas a la pelota. A la vuelta de la ducha, Michel se quedó inmóvil viendo las maniobras de un enano que asomaba apenas un palmo por encima de la hierba: Mister, ¡cómo juega el del pelo pincho¡, le comentó el dueño de la banda derecha a ex preparador del F.C. Barcelona. Jugaba con el 10 y tenía entonces 12 años. Era Iván de la Peña y Michel lo caló antes que nadie.
Caprichos del destino, sus carreras deportivas vuelven a tener una cita transcendental este sábado a las diez de la noche: el santanderino cuelga las botas que manejó como pocos en Cornellá-El Prat y el madrileño se juega la vida con el Getafe en Anoeta.
Aquí al lado la foto de aquel día, que apareció en la edición del El Mundo Deportivo de Barcelona el miércoles 4 de octubre de 1995. Todavía la conservo entre mis recortes.

lunes, 16 de mayo de 2011

Finales internacionales (II): De Johan a Robson

En el capítulo anterior dejábamos a Schuster y señora huyendo de Sevilla para buscar acomodo en los brazos de Ramón Mendoza, pero iban a tener que esperar un ratito y visitar unas cuántas veces los juzgados antes de mudarse definitivamente a la capital. Mientras tanto, el equipo de Terry Venables seguía mirándose las manos para ver por dónde se había ido la Copa de Europa. No fueron los únicos. Esa temporada 85-86 el fútbol español colocó a un representante en cada una de las finales, pero sólo el Real Madrid de Amancio (que empezaba de paso su cosecha de ligas) consiguió salir victorioso en la final de la UEFA jugada a doble partido ante el Colonia. Por su parte, el Atlético de Madrid se la pegaba en la final de la Recopa ante el Dinamo de Kiev de los talentosos Belanov y Blokhine.
Los años siguientes fueron movidos en Can Barca, con motín incluido, destitución de Venables y salida por patas de Schuster para coger el puente aéreo. Llegó Luis Aragonés para ganar la Copa de 1988 y de nuevo las puertas de Europa abiertas de par en par.

RECOPA 1988-1989: F.C. Barcelona 2-0 Sampdoria

Este fue el año en el que la historia del F.C. Barcelona cambió para siempre. Había llegado a la ciudad un tipo flacucho y con gabardina para terminar el trabajo que había dejado pendiente en su época de jugador. Johan Cruyff puso patas arriba la entidad y dejó las cosas claras desde el principio: “Aquí las normas las pongo yo. Y quien no las acepte irá a la calle”. Las primeras víctimas fueron Carrasco y Julio Alberto, pero la lista iría aumentando hasta que su juguete tomó forma.
La primera pieza del puzzle quedó encajada en el Wankdorfstadion de Berna donde cayó la tercera Recopa de Europa. En el estadio maldito, la Sampdoria de Boskov mordería el polvo por culpa de los goles de Salinas y López Rekarte. Allí estaban Víctor Muñoz, Pagliuca, Mancini, Vialli o Cerezo. Luego muchos de ellos repetirían en la final de Wembley.



SUPERCOPA 1989 : A.C. Milan 2-1 F.C. Barcelona

Como premio a la conquista de la temporada anterior los culés pudieron tuvieron el placer de medirse a doble partido a la maquinaria rossonera de Arrigo Sacchi , que en la final de la Copa de Europa disputada precisamente en el Camp Nou había aplastado por 4-0 al Steaua de Bucarest. La ida se jugó en Barcelona el 23 de noviembre de 1989 y terminó con empate a un gol. Un penalti de Aloisio sobre Massaro y transformado por Van Basten permitió adelantarse a los italianos, pero Amor aprovechó un error de la zaga para igualar la contienda. Con las espadas en todo lo alto se llegó al desempate del 7 de diciembre en San Siro. Con niebla y vestidos de azul, los pupilos de Johan Cruyff no chutaron a puerta en todo el partido y sólo la gran actuación de Zubizarreta evitó un ridículo mayúsculo. Un gol de Evani fue suficiente para que la copa se quedara en la sala de trofeos del mejor equipo del momento. El vídeo siguiente es un resumen de la tiranía ejercida por los muchachos de Silvio Berlusconi durante esos años. Atención a la final Intercontinental de 1989 ante Nacional de Medellín con René Higuita en la puerta y Leonel Alvarez moviendo la melena por la medular. Ese era el equipo del Pacho Maturana.



RECOPA 1990-1991: F.C. Barcelona 1-2 Manchester United

La temporada 89-90 terminó con una Copa del Rey de sabor especial por vencer en la final al eterno rival y de nuevo el billete listo para la Recopa. A los Laudrup y Koeman se unió ese verano un búlgaro de cabeza no muy bien amueblada pero que tenía muy buena puntería: Hristo Stoichkov. Con estos mimbres y un juego muy abierto, el equipo del holandés volador consiguió la primera de sus cuatro ligas consecutivas pero tropezaría en Rotterdam ante el Manchester United de Alex Ferguson y un viejo conocido: Mark Hughes. El galés había esperado paciente a que llegara el momento de la venganza y ésta se consumó gracias a los dos chicharros que le hizo a Carles Busquets, que tuvo una noche para olvidar.



COPA DE EUROPA 1991-1992: F.C. Barcelona 1-0 Sampdoria

El título de liga permitió participar nuevamente en la máxima competición continental de clubes y en La Catedral el F.C. Barcelona se coronó por primera vez. Hubo que sufrir y llegar a la prórroga para que Ronald Koeman encontrara una rendija en la meta de Giuanluca Pagliuca. La Sampdoria, con muchos de los que habían caído en Berna unos años antes, volvía a capitular ante un equipo que empezaba a llenar páginas en los libros de historia. La culpa la tuvo un cañonazo que superó los 100 kilómetros por hora. En el camino había quedado el testarazo de José Mari Bakero en Kaiserslautern cuando el tiempo se iba sin remisión.



COPA INTERCONTINENTAL 1992 : San Pablo 2-1 F.C. Barcelona

Para cerrar el año del primer doblete grande, el F.C. Barcelona acudió a Tokio a disputar la Copa Intercontinental ante los brasileños del Sao Paulo. Los que lo vimos desde aquí tuvimos que pegarnos el madrugón (4:00 de la madrugada) para ver a Raí clavarlas de todos los colores. El hermano pequeño del doctor Sócrates, con el 10 cosido a la espalda como mandan los cánones, aprovechó una diablura de Muller para remachar a bocajarro el empate y a poco del final empotró una pelota en la escuadra que Zubizarreta sólo pudo acompañar con la mirada. Como pasó con Hughes, Toninho Cerezo, el mítico mediocampista del bigote, se tomó aquella madrugada la revancha de Berna y Wembley. El equipo de Telé Santana dominaba el mundo del balón.



SUPERCOPA 1992 : Werder Bremen 2-3 F.C. Barcelona

Para terminar una temporada mágica, el Barca volvió a disputar el título de Supercampeón y esta vez se le puso delante el Werder Bremen alemán, que había derrotado en la final de la Recopa al A.S. Mónaco de Youri Djorkaeff y George Weah dirigidos entonces por Arséne Wenger. Los partidos se jugaron en febrero y marzo de 1993. La ida acabó con empate a un gol y en la vuelta del Camp Nou Johan Cruyff le ganó la partida a Otto Rehhagel gracias a un gol en las postrimerías de Jon Andoni Goikoetxea.



COPA DE EUROPA 1993-1993: A.C. Milan 4-0 F.C. Barcelona

Después de ganarlo prácticamente todo, los jugadores del Barcelona se plantaron en Atenas pensando que aquello iba a ser coser y cantar. El Milan de Fabio Capello parecía dar sus últimos coletazos, pero esa tarde pasaron por encima del equipo catalán. Cuatro goles como cuatro soles que fueron la sentencia para muchos de los que saltaron al Olímpico. Massaro en dos ocasiones, Savicevic desde su casa y Dessailly dejaron en el luminoso uno de los resultados más sonrojantes de la historia de la competición. Allí se terminó el primer gran ciclo triunfal del F.C. Barcelona y habría que esperar unos cuantos años para volver a ser habituales en los partidos decisivos.



RECOPA 1996-1997: París Saint Germain 0-1 F.C. Barcelona

Con Johan Cruyff fuera del equipo, Núñez se trajo a Robson para hacer de puente hasta la llegada de Louis Van Gaal. Sir Bobby llegó acompañado de un joven Mourinho y armó una de las mejores plantillas que se recuerdan en la Ciudad Condal. A la cabeza de todos Ronaldo Luiz Nazario da Lima y a su lado Luis Figo, Iván De la Peña, Popescu, Luis Enrique o Guardiola. Un equipo armado hasta las trancas en medio campo y encomendado a la inspiración del cántabro y al tino del brasileño. En la final, disputada otra vez en Rotterdam, un solitario gol de penalti del Fenómeno fue suficiente para aumentar a cuatro el número de Recopas.



SUPERCOPA 1997 : BV Borussia de Dortmund 2-3 F.C. Barcelona

La última Supercopa jugada a doble partido enfrentó al F.C. Barcelona con el sorprendente Campeón de Europa, el Borussia de Dormund. Con Van Gaal ya en el banquillo, los culés se hicieron con su segundo trofeo por un global de 3-1. La ida, jugada en casa el 8 de enero de 1998, se decidió por los goles de Luis Enrique y Rivaldo. En marzo se jugó la vuelta que tuvo poca cosa que contar ya que Giovanni adelantó a los catalanes y sentenció la final. Al final empate y otro trofeo a la buchaca.

jueves, 12 de mayo de 2011

Finales internacionales (I): Antes de Cruyff

Antes de que Bobby Moore reciba el 28 de mayo al F.C Barcelona y al Manchester United para dilucidar la supremacía en el fútbol del viejo continente, conviene echar la vista atrás y repasar las presencias del equipo catalán en los partidos definitivos de las competiciones internacionales. Me vais a permitir que ajuste el artículo más o menos a la edad que uno tiene y a unos cuantos recuerdos más o menos borrosos. Por otra parte, mirando hacia atrás, lo único que se ve entre las Copas de Europa del Real Madrid son unas cuantas Copas de Ciudades de en Ferias (tres concretamente y el trofeo en propiedad ante el Leeds de Don Revie) y algunas finales más (perdidas, claro). Por eso voy a empezar la crónica por Basilea y aquella final de la Recopa de 1979 que supuso un antes y un después para el barcelonismo.

RECOPA 1978-1979: F.C. Barcelona 4-3 Fortuna de Dusseldorf

En Saint Jakobs Park los aullidos de un joven Lobo Carrasco y los goles de Tente Sánchez, Asensi, Rexach y Hansi Krankl sirvieron para tumbar en el tiempo suplementario al correoso Fortuna de Dusseldorf de los hermanos Thomas y Klaus Allofs. De paso se saldó una cuenta pendiente con el país helvético donde el equipo español había caído en un final de Copa de Europa y otra de Recopa.



SUPERCOPA 1979: Nottingham Forest 2-1 F.C. Barcelona

Como campeón del segundo trofeo en importancia, el Barcelona debía medirse al Campeón de Europa para resolver el título de Supercampeón. Delante el mitiquísimo Forest dirigido desde el lateral por el no menos legendario Brian Clough y en el campo por Peter Shilton y Trevor Francis (el hombre del millón de libras). El resultado que pongo es el agregado de los partidos de ida y vuelta jugados en The City Ground (1-0 el 30 enero de 1980) y el Camp Nou (1-1 el 5 de febrero de 1980). Alan Simonsen y Roberto Dinamita eran perlas extranjeras del equipo de Rifé en el que figuraba también un joven Chus Landáburu.



RECOPA 1981-1982: F.C. Barcelona 2-1 Standar de Lieja

Otra vez a la Recopa y Udo Lattek jugándose el pescuezo en casa, porque la UEFA había decidido que la final ese año se jugase en Barcelona. Enfrente un equipo belga con jugadores de la talla de Eric Geters o Michel Preud´Homme que terminaron sucumbiendo a un estadio entregado a los goles de Simonsen y el brujo Quini.



SUPERCOPA 1982: Aston Villa 3-1 F.C. Barcelona

La final se jugó nuevamente a doble partido y los pupilos de Lattek, ya con Bernd Schuster enfundado  en la pechera blaugrana, consiguieron la victoria en la ida del Camp Nou (19 de enero de 1983) gracias a un solitario gol de Marcos Alonso. En Villa Park, un tanto a poco del final de Gary Shaw llevó el partido al alargue donde los villanos consiguieron otros dos que les valieron para ser Supercampeones por primera vez en su historia.

COPA DE EUROPA 1985-1986: F.C. Barcelona 0-0 Steaua de Bucarest

Todo de cara para alzar por fin el ansiado entorchado de los grandes y batacazo al más puro estilo de Brasil en Maracaná. No me voy a extender mucho pero pocas veces una final tuvo un color más diáfano que esta: el Sánchez Pizjuan de Sevilla teñido de azul y grana, un rival poco menos que desconocido y un partido épico ante el Goteborg en semifinales hacían presagiar a la parroquia que la copa esta vez no se escapaba. Pero lo hizo y de la forma más cruel posible en una tanda de penaltis para olvidar. Cuatro tiros erraron los de Venables que enterraron sus opciones en las manoplas de Duckadam, convertido desde entonces por los culés en la reencarnación del mismísimo diablo. A parte del guardameta rumano, el partido dejó el nombre de varios de los que se alinearon con él para el recuerdo: Piturca, Balint, Belodedici, Lacatus…Y en el bando local destacó sobre todos el de Bern Schuster, que abandonó el recinto al ser sustituido y al que Josep Lluis Núñez le mandaría este mensaje al día siguiente: “ Schuster no jugará nunca más en el Barca”. Lo haría en el Real Madrid

Lo que tú y yo sabemos

Antonio Vega Tallés
(Madrid, 16 de diciembre de 1957 - Madrid, 12 de mayo de 2009 )

Yo, que de siempre he sido un aficionado a los ídolos con pies de barro, tengo hoy en lo alto del cerviz una estocada desprendida que me perfora el alma de norte a sur, de este a oeste.
No son las cinco de la tarde, ni ha muerto Ignacio Sánchez Mejías, ni tampoco toca revisión de los poemas de Lorca.
Apenas se habían acostado las agujas sobre la una del mediodía cuando el teléfono móvil se arrancó a los acordes de "Hoy me dió por ser honesto" de El Arrebato,una canción pequeña hecha canela fina en la garganta de Antonio Vega.
Un frío mensaje de texto de una amiga en la distancia me abrió las carnes:
"Se ha a muerto Antonio" me decía.
- ¡¡¡ No puede ser, joder, no puede ser... ¡¡¡.
Y en seguida volví a aquel concierto en el Filar donde le regalé mis últimas lágrimas a su chica preferida.
Ese día sus ojos escondidos y su voz rota por la pena de una ausencia dejaron en la platea la sensación de que la habitación seguía completamente desordenada.
Hoy, en el fondo, me alegro por Marga, compañera y cómplice, inspiración y salvadora siempre.
Allá en Orión, seguro que estará esbozando una sonrisa mientras va descontando las noches que estuvo separada de él:
3000,2999,2998...
Y mientras, en mi corazón, sigo llorando otra vez...
PD: Si te encuentras con Enrique seguro que saldrá la mejor canción del mundo.
Esa si que será una auténtica "Lucha de Gigantes".
Hasta siempre.

domingo, 8 de mayo de 2011

La prueba del 7

Llevamos años discutiendo en este país sobre si el título de 7 de España le corresponde a Raúl González o a David Villa y el fanatismo nos ha impedido ver que el portador más laureado del ese dorsal está en el fútbol más pequeño. Javier Rodríguez Nebreda, para el mundillo Javi Rodríguez o Rodríguez a secas, alargó ayer por la tarde un poco más su leyenda. El de Santa Coloma sumó a su palmarés la I Copa del Rey de fútbol sala con el F.C. Barcelona y poco a poco va cumpliendo con la tarea que le encomendaron al llegar al Palau en 2006: poner la sección en condiciones de mirar a los ojos de Inter Movistar y El Pozo de Murcia.
Poco a poco la vitrina se va llenando de trofeos. Este último logrado se une a  la Copa de España ganada a los murcianos de El Pozo a principios de año en Segovia y el primer puesto en la liga regular.
A nivel personal, el Siete acumula 2 Copas del Mundo4 Eurocopas con La Roja2 Ligas y 3 Copas de Europa de su época en Playas de Castellón (descendido esta temporada a la División de Plata).
Lo dicho, el 7 de España juega al futbito y viste unas Kelme de color amarillo chillón.
Y para todo lo demás siempre nos quedará el gol a Brasil en la final del Mundial de Guatemala:

jueves, 5 de mayo de 2011

No soy un hombre, soy Cantona

Antes de la final de Roma en 2009, el F.C. Barcelona y el Manchester United se vieron las caras en las semifinales del torneo del año anterior. En la ida, disputada en el Camp Nou, los Diablos Rojos vencieron gracias a un disparo lejano del eterno Paul Scholes. Recuerdo que Cristiano Ronaldo falló un penalti esa noche. El equipo de Rijkaard, muy abollado ya por los caprichos de Deco y Ronaldinho, intentó la machada en el partido de vuelta pero el choque acabó con empate sin goles y los muchachos de Sir Alex Ferguson obtuvieron el billete para la final de Moscú (derrotaron al Chelsea de Mourinho por culpa de un inoportuno resbalón de John Terry en los tiros desde los once metros). Ese partido de vuelta en Old Trafford, jugado en 29 de abril de 2008, aparece por un instante en la televisión de la taberna de "Looking for Eric", la película de Ken Loach. El protagonista, Eric Bishop, empleado del servicio postal y supporter del ManU, atraviesa una mala racha: su segunda mujer lo ha dejado tirado, sus hijastros están a un paso de la delincuencia y para colmo sigue perdidamente enamorado de su primera esposa. Con ese panorama la sombra del suicidio planea por su cabeza hasta que en ese infierno de vida se cruza un invitado inesperado: Eric Cantona.
El futbolista francés, idolatrado como pocos a orillas del Mersey, ejerce de Pepito Grillo particular a tiempo completo y gracias a sus consejos consigue que la vida del desgraciado cartero de un giro radical.
Cuando las cosas se ponían feas, ahí estaba L'enfant terrible para echar un cable y recuperar las ganas de vivir de Bishop. Mientras buzonean juntos la ciudad, los goles de Cantona iluminan la pantalla:
- ¿Te acuerdas del Sunderland? ¡Ahhhh, eso fue precioso, magnifique¡ Fue como un baile, una danza. Ese gol me dio cuerda para meses. Te llega tanto que se te olvida toda la mierda de tú vida durante unas pocas horas.



Más goles, las celebraciones parado en el terreno con aquel gesto desafiante mirando al tendido, la tribuna entregada al Dios, los nueve meses de sanción, todo pasa en apenas tres minutos de metraje hasta que la secuencia termina con Cantona soltando una frase para la posteridad:
- Es curioso, a veces nos olvidamos que sólo eres un hombre.
- No soy un hombre, soy Cantona.

Imperdible para los amantes del cine y del fútbol.

La última clase del Maestro

Hoy hace exactamente veinte años que Ricardo Enrique Bochini impartió la última de sus clases magistrales sobre un terreno de juego. Era domingo en la Doble Visera y enfrente del Independiente del Pato Pastoriza se colocó el rocoso Estudiantes de La Plata para pelear los puntos de la undécima jornada del Campeonato de Primera División. A los 41 minutos de la primera mitad, el Bocha recibió en tres cuartos de cancha de espaldas a la portería del Pincha y la colocó en un costado dejando atrás a Pablo Erbín, que venía con los tacos arriba como una locomotora. El planchón alcanzó nítidamente la rodilla derecha del Duende Rojo que tuvo que salir del terreno de juego en camilla. El defensor visitante miró al juez del partido y enfiló sin vacilar el túnel de vestuarios increpado por la grada de preferencia. Aunque en principio se habló de un leve esguince de rodilla, la realidad es que Bochini tuvo que dejar de ejercer para siempre aquel día. El partido acabó con empate a un gol, pero eso a casi nadie le importa. Todo el mundo en Avellaneda recuerda que aquel 5 de mayo de 1991, con 36 años de edad, un desleal hachazo apagó para siempre la luz del Más Grande Símbolo Rojo.

martes, 3 de mayo de 2011

La Sexta

La Sexta es una cadena de televisión generalista que programa los partidos de la Liga BBVA y también es el número de finales de Copa de Europa (1 de Copa de Europa y 5 de Liga de Campeones para los ortodoxos) que verán estos ojos afortunados cuando el próximo 28 de mayo el F.C. Barcelona y el Manchester United salten al terreno de juego del nuevo Estadio de Wembley.
¡Qué levante la mano el que pueda decir algo parecido¡
La cosa arrancó torcida en el Ramón Sánchez Pizjuán de Sevilla un 7 de mayo de 1986. Esa noche, con la Bombonera de Nervión entregada a la causa barcelonista, Bernardo Schuster demostró que todo lo que tenía de virtuoso con el balón en los pies lo tenía también de mal compañero. Al poco de ser sustituído cogió las de Villadiego y no vio como el equipo de Terry Venables, el de la presión a toda cancha, se estrellaba contra los guantes de Helmuth Duckadam. Allí conocimos a Lacatus, Piturca, Balint y Belodedici.
Luego vino lo de Londres, el 20 de mayo de 1992. "Ella dijo sí" fue el titular en el suplemento de la revista Época. Corría el minuto 111 del la prolongación cuando el que escribe voló literalmente sobre la mesa del salón de Santa Catalina. A las 22:31 horas de la noche, no lo olvidaré nunca, Ronald Koeman ajustó la pelota entre el guante de Pagliuca y la madera derecha de la portería de la Sampdoria. Para el recuerdo quedó el "Salgan y disfruten" con el que Johan Cruyff despachó la charla previa al encuentro. Imposible también es olvidar que para llegar a ponerse delante de los Vialli, Cerezo o Mancini tuvo que obrarse un milagro en Kaiserslautern.
La siguiente, en 1994, puso muy a mano el chiste fácil: "Tragedia griega". Recuerdo que ese 4-0 del Milán de Capello en el Olímpico de Atenas se gestó el verano anterior en el viejo Carlos Tartiere de Oviedo. Ese batacazo fue la sentencia para muchos de los que estuvieron allí vestidos de corto. "Se ha terminado un ciclo", apuntilló el entrenador holandés, y antes de entrar el verano empezaron a rodar cabezas. La primera creo recordar que fue la de Zubizarreta y luego Johan perdió la suya para siempre.
Hubo que esperar hasta el 2006, en París, para volver a hincarle el diente a la Orejona. Uno de los nuestros, Thierry Henry, se empeñó en poner las cosas difíciles durante buena parte del partido, pero Jens Lehmann se pasó de frenada como hizo con Torres en la Eurocopa y los goles bajo la lluvia de Eto´o y Belleti permitieron posar otra copa otra más en la vitrina.
Y la última fue la de las lágrimas, por verla en directo, en Roma, donde se jugó el mismo partido que se escenificará a finales de este mes. Otra vez Samuel y, como no, el vuelo de Messi para cazar la asistencia de Xavi son las imágenes de un partido sublime.
Ahora toca volver a Wembley para cerrar el círculo que se inició aquel lejano 20 de mayo de 1992.
Mi marcador particular en el asunto de levantamiento de trofeos está tres a dos, pero esta vez el empate no me vale.

lunes, 2 de mayo de 2011

Juan Pablo II

El socio número 108.000 del F.C. Barcelona ya es beato.
"De todas las cosas sin importancia que hay en el mundo, el fútbol es la más importante".
Juan Pablo II